Nuestro país ha venido siendo testigo y ha estado envuelto dentro de los últimos 20 años en una gran revolución de emprendimiento social empresarial de una nueva generación de emprendedores emergentes. Este nuevo fenómeno económico ha permitido la inserción de muchas peruanos que se encontraban en extrema pobreza al mercado económico empresarial.
En nuestro caso particular de la capital, Lima, la mayoría de los emprendedores emergentes inmigrantes del interior de nuestro país, que llegaron de provincias a la gran ciudad metropolitana en busca de mejores recursos y mejor calidad de vida se convirtieron en exitosos microempresarios.
En este contexto historico; es dable mencionar que la actividad de las microfinanzas en el país ha tenido un rol importante en esta gran revolución, siendo la palanca financiera para la creación de diversas microempresas tanto en la capital como en todo el territorio nacional.Mientras esta gran revolución economica crecía, una gran demanda por este nuevo servicio de microcréditos también se generaba en la sociedad. Así, emergieron organizaciones como las cajas municipales con la finalidad de convertir a las pequeñas organizaciones financieras en grandes bancos rurales. Se generó un compromiso de las organizaciones de las microfinanzas hacia la población de bajos ingresos.Esta interesante revolución de las microfinanzas en el país ha sido un aporte para que muchos emprendedores emergentes puedan ir construyendo sus historias crediticias.Esto conllevó a la creación de una red de entidades de microfinanzas en zonas rurales y remotas con el objetivo de promover el desarrollo local y reducir la migración a las ciudades grandes. El movimiento de capital originado por estas entidades financieras en cada comunidad ha permitido el logro del éxito económico de los emprendedores emergentes.
Esta revolución sigue replicándose hasta la actualidad en nuestra sociedad de la misma manera en cada comunidad alrededor de nuestro país, siempre con la finalidad de apoyar a los emprendedores de bajos recursos menos afortunados y más necesitados. Es una revolución que ha ayudado a muchas emprendedores emergentes a lograr su sueño de ser dueño de su propio activo a través de un arduo trabajo, responsabilidad y sacrificio.
En conclusión, esta revolución económica ha generado en el caso particular de la Capital peruana la plataforma de una nueva clase media emergente gracias a las masivas migraciones del campo a la ciudad.
Emprendedores emergentes que migraron a la capital trayendo consigo diversas tradiciones arraigadas de sus propias culturas; las cuales se mantienen en sus familias generación tras generación. Llegaron a la capital con la finalidad de mejorar su nivel de vida; sin embargo terminaron conquistando socioeconómicamente La Nueva Lima.Una nueva Lima que fue invadida por emprendedores emergentes de diversas provincias hace 20 años que llegaron con maletas llenas de sueños y en la actualidad la mayoría de ellos ven sus sueños realizados en sus hijos y nietos
El emprendimiento a través de esta nueva clase media emergente fue posible gracias al desarrollo de sus propias microempresas como una alternativa para lograr un ingreso económico que les permitiera la supervivencia de sus primeros años en la capital ante la falta de trabajo y carencia económica. Gracias a esta gran revolución económica en la actualidad el 95% de empresas en el Perú son microempresas, que aportan el 65% de nuestro PBI y constituyen el 75% de la PEA nacional por lo cual constituyen el segmento de población más importante del desarrollo económico del país en los últimos 20 años.
En este sentido, es gracias a esta revolución económica que podemos hablar en la actualidad no solamente de una clase media emprendedora emergente; si no de todo un país que emerge gracias al éxito de cada peruano que pudo lograr su sueño.
Guillermo Quintana B.
Director Peruventures
www.peruventures.org
